Regalos corportativos

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Esto que te voy a contar no es una historia real, pero nada se aleja tanto de la misma.
(tira beneficio para que siga leyendo o de lo que va a encontrar o de prque tiene que leer)

Un fin de semana cualquiera, dos emprendedores decidieron poner en marcha su negocio. Ambos tenían una edad parecida y una preparación muy similar. Es decir, eran gente con formación universitaria, un buen dominio de un segundo idioma y cierta experiencia laboral que les daba claridad sobre el desafío que estaban por afrontar. Además, tenían la misma motivación: construir un negocio que no solo generara ingresos, sino que también les permitiera crear el estilo de vida que soñaban.

Con presupuestos ajustados y una gran pasión, ambos empezaron sus proyectos con la esperanza de llegar lejos. Sabían que se podía llegar muy lejos con presupuestos muy ajustados. Lo habían visto en muchos casos…, en mucha gente.

Un año después de aquel fin de semana que decidieron poner su negocio en marcha, esos dos emprendedores se reencontraron en un evento presencial. Sus vidas seguían siendo similares: ambos felices con sus familias y encabezando sus negocios. Pero había una diferencia clave.

A uno de ellos, ya le estaba dando un buen sueldo mensual, había logrado consolidar una marca atractiva y rentable, con una web que le generaba ingresos estables, una cartera creciente de clientes y el lujo de seleccionar los proyectos que aceptaba y tener lista de espera.

El otro, en cambio, vivía bajo un cielo gris eterno: apenas había generado beneficios, trabajaba un montón de horas de manera improductiva la mayor parte del tiempo y se estaba empezando a plantear seriamente en colgar los botines. Le llegaban pocos clientes y, además, tóxicos. Cada paso le costaba una barbaridad. Se sentía atrapado en una espiral de esfuerzos improductivos: horas invertidas sin resultados, clientes difíciles y la sensación de estar al borde de abandonar.




Razones convincentes por las cuales su producto es superior a otras soluciones que sus clientes potenciales podrían elegir, incluso no hacer nada. Razones convincentes para creer que lo que dices es verdad. Razones de peso para aprovechar la oportunidad hoy.

La diferencia

¿Te preguntaste cuál es la diferencia en la vida de estas dos personas?

No es la inteligencia, ni el talento, ni la dedicación. Los dos tenían esas cualidades. No es que uno lo quería más que el otro. No es que uno tenga «buena suerte» y el otro «mala suerte». La diferencia, afortunadamente, no tiene nada que ver con eso.

La verdadera diferencia radica en:

La verdadera diferencia estuvo en cómo comunicaron su marca y cómo conectaron con sus clientes. No alcanza con ofrecer buenos productos o servicios; es fundamental transmitir una esencia que genere confianza y construya relaciones sólidas.

Si tenés un producto bueno y no sos capaz de mostrarlo, estás perdido.

• Si tenés un producto bueno y sos capaz de mostrarlo, ganas dinero. Todo bien.

• Si no tenés un producto bueno y no sos capaz de mostrarlo, prepara el curriculum.

• Si no tenés un producto bueno y sos capaz de mostrarlo, o sos un estafador o un genio. O las dos cosas.

El emprendedor exitoso entendió que destacar en un mercado competitivo requiere más que buenos productos o servicios. Necesitaba transmitir su marca, crear una experiencia y asegurar que su público lo identifique como la mejor opción. t

Un servicio diferente

esta oferta solo va a estar disponible hasta la semana anterior a las fiestas. Miércoles 18 de Diciembre.

Un servicio que ahorra dinero

Esto es una solucion para los que no quieren perder tiempo y prefieren delegar,

como tampoco contamos con oficinas y una infraesctructura compleja, contamos con costos menores.